jueves, 19 de septiembre de 2013

El disfraz

..cuenta un  antiguo texto  espiritual respecto a que las fuerzas del mal buscan insesantemente  confundirnos de nuestra mision de amor en la tierra.
Usan todos los trucos imaginables, testean  incansablemente nuestros limites, nos llaman a desviarnos de mil maneras.. vicios, debilidades... y una sociedad que nos obliga a consumir incansablemente.. y a desviarnos una y mil veces de lo que realmente es importante.
Es tan elaborada la mentira, tan dificil de despegarla de nuestro propio ego que llegamos a creer que es real, que ese es nuestro destino y a aceptarlo sin mas...
Desprenderse de capas y mas capas de ego hasta amar en un solo movimiento inmovil llega muchas vidas, mucho trabajo personal.. y cuanto mas nos elevamos sobre el comun, mas refinadas son los espejismos con los que el mal busca confundirnos y alejarnos.
En algun punto, nos apareceran personas que parecen muy elevadas pero es solo otro espejismo y debemos aprender a reconocerlo. El mejor camino es olvidarse (una vez mas) del ego propio y no entrar en  el camino de la dualidad del ego, tironeandonos en un constante hambre de amor y satisfaccion personal.
No hay predesignios de ninguna clase, cada uno recorre un camino particularisimo, personal e inapelable.. o no.. el libre albedrio es total en este punto.
Por eso la unica manera de ver entre las tinieblas de este mundo es la meditacion diaria, meditar, reconectarnos con Dios es la unica forma de sentirnos mas cerca de la Luz Divina y menos en contacto con realidades que intoxican.

No hay comentarios:

Publicar un comentario